Nick Drake. El último de los poetas muertos
I never felt magic crazy as this
I never saw moons knew
the meaning of the sea
I never held emotion in the palm of my hand
Or felt sweet breezes in the top of a tree
But now you’re here
Brighten my Northern Sky
¿Quién era Nick Drake?, podríamos encasillarlo como músico, compositor, el último de los poetas muertos…lo que sabemos de él es de oídas porque en su vida nunca fue famoso, sin embargo hoy en día es considerado como uno de los intérpretes más influyentes en la música actual: Counting Crows, Blur, Iron and Wine, José González; son sólo algunos de los músicos que han confesado contar a Nick Drake como uno de sus maestros musicales, infinidad de covers se han grabado de algunas de sus melodías. Podemos decir que es uno de esos músicos transversales y luminosos que nunca tuvieron el reconocimiento que se merecían, hasta después de su muerte.
Para mí, la música de Nick Drake es como si de repente, sin invitación, entrara a una casa que lleva abandonada muchos años, empolvada, llena de hojas en el piso, una casa que se quedó detenida en el tiempo, donde los muebles siguen como se habían quedado. Es como si en esta casa encontrara una vieja cinta, una antigua grabación, y por curiosidad consigo un reproductor y me pongo a escuchar, y de repente, rompiendo el viento, entra en mis oídos y en mi alma una voz guiada por una guitarra, una música íntima, lenta, poética, y de repente me doy cuenta que en esta casa donde nadie ha entrado, estoy escuchando esa música que por años y años quedó ignota, y que no sé nada de quien la compuso ni por qué, solo escucho la voz de este atormentado fantasma que vertió toda su alma en las letras de sus melodías.
28 minutos, casi media hora, esa es la duración del álbum “Pink Moon”, La obra cumbre de Nick Drake; mi recomendación: escucharlo de madrugada, media hora antes de que amanezca. Así como hice yo cuando necesitaba desesperadamente sentir… sentir algo.
1.- Primer Track: Pink Moon
La luna rosa…es la única pieza que tiene un instrumento adicional, además de la guitarra y la voz, tiene un piano perfectamente acoplado a los extraños acordes que hacen aparición en medio del silencio, la noche aún es oscura y hace frio, la luna es rosa. La luna rosa era un símbolo de mal augurio entre los pueblos nativos de Norteamérica, en todo caso simboliza algo drástico, aquel que ve la luna rosa o la luna roja debe estar preparado.
“Escrito lo vi, lo escuché decir…La luna rosa está en camino, nadie de nosotros está a la altura, la luna rosa los encontrará a todos”
2.- Place to be.
Place to be, segunda pieza del Pink Moon hace su aparición y llega a devastar y a congelar la noche, es una confesión atroz, que no da concesiones:
“Ahora soy más oscuro que el profundo mar, sólo déjame en paz, dame un lugar para estar.”
El lugar de Nick Drake en el mundo se llamó Tanwoth-In-Arden, al sur de Birmingham, donde pasó su infancia aunque en realidad nació en Birmania; su padre trabajaba en una empresa de antigüedades y después del nacimiento de Nick, tuvieron que trasladarse a Bombay; la delicada salud del pequeño hizo que se establecieran definitivamente en Tanworth-In-Arden, tal vez esto explique la constante búsqueda de Nick, una especie de desarraigo traducido en depresión que lo persiguió toda su vida, como aquellas almas que viven sabiendo que este mundo no es enteramente su casa y existe; forzosamente algo más.
3.- Road.
Tercera pieza del Pink Moon: como casi todas las piezas de Nick Drake, se usa una guitarra afinada de forma especial: Nick era un experto en el arte de utilizar afinaciones alternativas en su guitarra además de un extraordinario guitarrista, su técnica es una de las más complicadas de imitar.
La familia de Nick Drake amaba la música, su madre incluso componía y cantaba extrañas y melancólicas melodías que evidentemente dejaron su influencia en el joven Nick, quien con el tiempo también aprendió a tocar el saxofón y la flauta. Poco a poco llegaron los años de la juventud y el joven e inseguro Nick acudió al elitista colegio Marlborough, no obstante haber destacado en aspectos académicos y deportivos, siempre sufrió de baja autoestima y llego a evitar el contacto con la gente, especialmente de las mujeres.
4.- Which Will.
Esta es una de mis piezas favoritas…una carta de amor melancólica y derrotada:
“A quien es que amarás, a quien elegirás, ya que a mí no será”; ese sentimiento atroz de saberse derrotado y ni siquiera saber por quién.
Nick siempre tuvo problemas para relacionarse con la gente, claro que esto tuvo variaciones a lo largo de su vida, pero una constante fue su enorme sensibilidad a la naturaleza y su gusto por la soledad. Se dice que en toda su vida sólo se le declaró a una chica.
5.- Horn.
Al final de su vida, en una de las etapas de depresión más intensas, Nick decía que ya no le encontraba sentido a las palabras, existen piezas extrañas y sencillas compuestas solo por una guitarra y esta es una de ellas, podemos decir que es sumamente enigmática. Es música para ser escuchada en lo más profundo de la noche.
6.- Things Behind the Sun.
En vida, Nick hizo públicos 3 discos: Bryter Later, Five Leaves Left y Pink Moon, de todos, Pink Moon es el más sencillo y enigmático, se dice que Nick sencillamente lo dejó en el escritorio del ejecutivo de la disquera Island quien lo encontró al día siguiente y pensó que se trataba solamente de un demo. Fue grabado de noche, al parecer a lo largo de una o dos noches sin mayor adorno que Nick y su guitarra, es uno de los documentos sonoros más interesantes del siglo XX.
7. – Know.
Es una pieza inaudita, lapidaria, un blues acústico prácticamente sin letra: Know that I love you/Know I don’t care/ Know that I see you/ Know I’m not there. La noche sigue su camino y las palabras poco a poco dejan de tener sentido, las confesiones se hacen más directas y al mismo tiempo menos inteligibles.
8.- Parasite.
Una de las piezas más autobiográficas; Nick pudo y debió haber alcanzado el éxito y la fama en vida; tuvo incluso una etapa luminosa, con presentaciones, creatividad fluyente y luminosidad, aunque en realidad los arreglos de sus primeros discos nunca fueron enteramente de su agrado, Nick buscaba la sencillez ante todo, consciente de lo que podía evocar con tan solo su voz y su guitarra.
9.- Ride.
Pink Moon se acerca a su fin, también la noche y las sombras se hacen más oscuras, es tiempo de una melodía que en realidad es un llamado, ¿A quién? No lo sabemos en realidad, solo sabemos que poco a poco deja de hacer frio y asoma el alba, ¿qué sucederá después?
10.- Harvest Breed.
El final se acerca “cayendo lejos, cayendo libre” es bueno encontrar un amigo, sabiendo que puede ser el final, la cosecha se acerca (Harvest Breed) parece ser que estamos listos…
11.- From the morning.
No deja de sorprenderme el hecho de que la última pieza del último disco de uno de los compositores más melancólicos de la historia del folk, sea una pieza llena de tanta luz y belleza; el final de la noche ha llegado, el sol comienza a salir, “ahora estamos de pie y en todas partes”, las sombras se alejan y solo queda el futuro.
Nick vivió 3 años más después de haber creado Pink Moon, las circunstancias de su muerte siguen sin esclarecerse; se sabe que en los últimos días estaba animado y con esperanza en el futuro; el 25 de noviembre de 1974 una sobredosis de antidepresivos terminó con su vida; ¿Inducido o accidente?, no lo sabremos nunca: no existe ninguna nota de despedida y no sabremos nunca si su intención era quitarse la vida: solo nos queda pensar en que hubiera pasado si tan sólo hubiera podido superar ese maldito bache; la depresión que lo aquejo en algunas etapas de su vida.
Personalmente me gusta pensar en “From the morning” como una nota de despedida; es una canción llena de luz y esperanza, que cura y restablece con un mensaje muy claro; “Es hora de que vuelvas a aprender los juegos que aprendiste al amanecer”- el único antídoto- al fin y al cabo contra “la malvada estupidez de las cosas cotidianas” es mantener presente siempre ese sentido de belleza excepcional que rodea el mundo y del cual Nick Drake siempre estuvo consciente.
“And now we rise/ And we are everywhere”
“Y ahora estamos de pie/ y en todas partes”
